CARTA ABIERTA DE UN PRESO POLÍTICO-Juan Máximo Copteleza Preso Político
01/10/2010 11:10 - CARTA ABIERTA DE UN PRESO POLÍTICO
Marcos Paz, 13/3/2010
Sr. Director del Informador Público:
A los oficiales, Jefes y subalternos, de la Fuerza Aérea Argentina, y a todos aquellos que estuvieron en los 70 y hoy se borraron, y en especial aquellos que se olvidaron de sus propios camaradas que hoy son presos políticos, por haber luchado contra el terrorismo ateo, marxista leninista, antipatria que asolaba en la Argentina y que no dudaban en matar, a soldados de la Patria, civiles y niños, en nombre de la Revolución socialista. Esos fueron años revolucionarios, lo nuestro, delitos de lesa humanidad. Yo digo: ¿por qué no van presos ellos y nosotros sí? ¿Saben por qué? Porque hay jueces que no tienen los cojones de meterlos presos, serviles de los gobernantes de turno; como ocurre en nuestra fuerza, desde el año 83 en adelante hasta la actualidad.
¿Sabían que somos diez, los presos de nuestra Fuerza, y en la actualidad nueve, dado que a uno de ellos tuvo un infarto y le realizaron tres bypass y seguro que no vuelve al penal de Marcos Paz? ¿Sabían que ya llevamos perdidos seis camaradas de distintas Fuerzas, en cautiverio por distintos motivos? Es fácil hacerse los distraídos y no poner lo que hay que poner sobre la mesa, para auxiliar y ser solidario con sus camaradas en prisión… La verdad que me siento defraudado una vez más. Bueno, esto era de esperar, si en la actualidad hay un Jefe de Estado Mayor genuflexo al gobierno de turno, como viene ocurriendo desde el 83, bien ganado tenemos el título de Panqueques.
Lo que más tristeza y vergüenza me da es que quien conduce la Institución sea un ex combatiente de Malvinas (Brig. Gral. Normando Constantino). Me gustaría preguntarle qué hacía en los años 70 y que hacía siendo alférez. Bueno, una vez más sopa; no le alcanza con ser genuflexo, además permite el desmantelamiento de la Fuerza. Que se venda la VI Brigada Aérea, que no le repongan el material, como el personal que se va, que le echen al J II. Y hay más cosas.
Como diría “Aguines”: ¡Pobre Patria mía!
También creía que en nuestra Institución existía la solidaridad, pero veo que no es así. Por el solo hecho de ser Soldados de la Patria y de sentir orgullo del uniforme que lucen y de las medallas que lucen sobre sus pechos.
Que Dios me proteja siempre y que la Virgen no me abandone nunca.
¡Viva la Patria!
Aunque yo perezca en Cautiverio.
Juan Máximo Copteleza
FAA
Preso Político, Marcos Paz
Módulo 4 Pabellón 6
DEMASIADAS MENTIRAS
En el mercado nacional, al igual que en muchos otros países del mundo, no es normal que pidamos una gaseosa, por costumbres que adoptamos dado el exitoso marketing de la empresa , es natural que pidamos la conocida marca mundial. De igual manera la sociedad Argentina fue sistemáticamente empujada desde 1984, a comprar la marca “30.000 desaparecidos”, pero entre las dos exitosas campañas permanentes de publicidad global hay una gran diferencia, las gaseosas existen, se las puede tocar, comprar y beber. Los 30.000 desaparecidos no, simplemente porque no existen, no existieron nunca.
Los incontables organismos de Derechos Humanos, el propio Gobierno Nacional, a través del mensaje directo del matrimonio Kirchner, y algunas O.N.G. de menor cuantía, repiten diariamente la cifra durante los últimos veintiséis años instalando la marca “30.000 desaparecidos”. Los bien pagos expertos en marketing lograron su inteligente cometido, pero ¿los argentinos recibimos alguna vez fundamentos ciertos? Por supuesto que la tarea les resultó más fácil, dado el incomprensible silencio sepulcral de los “Señores de la Guerra”, que pese a los sucesivos traspasos sucesorios en sus respectivos Estados Mayores, nunca aclararon el tema, ni aportaron la documentación que supongo poseen, cuanta negligencia absurda.
¡Señores basta de mentiras!, soy un ciudadano más, al que le preocupa y duele la muerte de un argentino, de un ser humano, solo de uno, eso es para mí suficiente, pero no quiero ser un “bobo” captado por una campana simplona y cara que pagamos todos los ciudadanos. Señores, ¡Quiero la lista de desaparecidos! ¡Quiero saber a cuáles 30.000 desaparecidos les debemos un homenaje póstumo!
Una vez más, no solo engañamos al pueblo argentino, a nuestros jóvenes, a los futuros dirigentes del mañana que ya nacieron en esta bendita tierra, sino que también lo hacemos para con el concierto de las naciones del mundo.
Lamentablemente en lugar de trabajar en la búsqueda de legalidad jurídica, como en iguales o parecidas circunstancias han funcionado importantes estadistas del mundo, la pareja presidencial habla en el país y el extranjero sobre 30.000 desaparecidos. Todos o la gran mayoría de los argentinos coincidimos en que es necesario conocer la verdad, pero toda la verdad no parcializada de los hechos ocurridos en medio de la guerra revolucionaria que nos toco vivir en los años 70, y así conservar la memoria para que nunca los argentinos debamos repetir iguales y tristes situaciones.
Creo también que la gran mayoría de los argentinos merecemos que la Tesorería General de la Nación, hiciera público cuánto dinero se invirtió en el desarrollo de las distintas campañas sobre Derechos Humanos en subsidios, viajes al exterior, indemnizaciones, juicios, publicidades, movilizaciones, prensa, radios, universidades, recitales, centros culturales, monumentos a la memoria. En fin todo el “deslizamiento” de dinero efectivo, en lo que tiene que ver con Madres, Abuelas, Hijos, Exiliados, Asilados, Piqueteros, Grupos de Choque y otros varios.
Por otro lado considero que la cuenta debería ser una sola, todo caído en aquella guerra revolucionaria interna, es un ser humano, un argentino muerto. Hasta hoy nadie menciona en sus discursos y escritos a los más de 2.000 argentinos asesinados por el terrorismo, aunque a la hora de los muertos, no hay dos lados, son todos argentinos que murieron trágicamente.
No existen hoy dos lados, no existieron nunca dos bandos, los muertos son muertos, hayan sido del sector que sean. Nunca formé parte de una banda, sí de una institución.
Señores dirigentes, integrantes del Poder Ejecutivo Nacional, altos Mandos Militares, asuman la responsabilidad histórica que les corresponde, por favor informen la verdad a nuestra sociedad, eduquemos a nuestros hijos y nietos en la verdad, con la verdad, base fundamental para la unión de todos. Basta de cubrir nuestros errores con egoísmos amparados en las posiciones ideológicas, que solo hacen a la información parcializada o desinformación, así no nos permitimos alcanzar la claridad histórica que nos conduzca a una fraterna y estable paz nacional.
Soy consciente de que todo lo que se opone a los criterios individualistas de la pareja presidencial, pasa a ser su enemigo, a quien o a quienes no dudan en atacar con dureza a través de sus habituales discursos de campaña permanente. Más aún cuando los temas son referidos a los Derechos Humanos y a la negra etapa que a todos nos tocó vivir. También soy consciente de que el Tte. Gral. Videla, jamás, convocará a una conferencia de prensa internacional, para contribuir el esclarecimiento de todos. Hay momentos que dudo en seguir planteando desde la cárcel, sin condena, estas cuestiones, pero con la ayuda de Dios, y pensando en los jóvenes dirigentes del mañana, esas dudas duran solo segundos, enseguida vuelvo a lo mío. No admite variaciones el contribuir a la verdad, los argentinos debemos “legalizar” todos los sectores para poder crecer como Nación libre, justa e independiente.
Claro, uno siente muy cerca, detrás de la pesada puerta de mi celda, están al acecho los ideólogos de aquellos valientes combatientes, hoy para mí, olvidados enemigos.
Debo pensar así luego de la siempre prudente reflexión, porque dentro del elenco presidencial desde su círculo más intimo, el de sus ministros y secretarios de estado y sus colaboradores en los otros poderes, todos agrupados en el mal llamado “progresismo”, que debería llamarse “montonerismo”, reagrupado por el matrimonio Kirchner están los que nunca combatieron, siempre mandaron a combatir.
Hoy asistimos a un intento político coherente con las acciones que, desde hace muchos años, emprendieron los subversivos en cuanto a la penetración continental dentro de la llamada “guerra fría”.
Nos quedamos casi solos, hemos sido abandonados por nuestros Comandantes y buena parte de nuestros camaradas. Tenemos que abogar ante jueces que de ello solo tienen el titulo, toda vez que, de hecho se comportan como renovados cuadros de aquel olvidado enemigo.
Desde sus posiciones atizan todos los odios que puedan movilizar el resentimiento, más la utópica idea de lograr la nueva U.R.S.S., Unión de Repúblicas Socialistas Sudamericanas.
Por ejemplo, el odio a las Fuerzas Armadas, de Seguridad, Policiales y Penitenciarias, acusadas de haber reprimido a los guerrilleros de la década del 70, el odio a quienes tienen algo acusándolos de gozarse de la miseria del pueblo, el odio contra los Estados Unidos, porque es la principal potencia del planeta, odio contra la Iglesia Católica tachada de complicidad con los represores. ¡Qué triste!, odio, siempre odio, ¡que pena!
La supresión de todo derecho individual tiene como correlato la omnipotencia del Poder Ejecutivo.
Norberto Cozzani
Prisionero político
C.P.F.Nº 1 EZEIZA
Fuente: INFORMADOR PUBLICO
NIÑO,CIVILES,VALIENTES HOMBRES DE TODAS LAS FUERZAS ASESINADOS POR LOS INFAMES TERRORISTAS,HOY TODAVÌA LIBRES,¿¿¿ NO SON ESTOS CRÌMENES DE LESA HUMANIDAD??? ...Miguel
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