Apropol acusó a jugadores
Se investigan los desmanes ocurridos en Unión-Central
La denuncia quedó radicada esta mañana en la Justicia Penal, aunque la División Judicial de la URI inició actuaciones de oficio. Piden que se analice la clausura del 15 de Abril.
El juez de Instrucción Segunda, Nicolás Falkenberg, recibió hoy una presentación judicial a nombre del secretario adjunto de la Asociación Profesional Policial (Apropol), Miguel Zalazar, que cargó las tintas sobre la responsabilidad de tres jugadores de fútbol de Unión que reaccionaron de manera violenta luego de empatar en el estadio 15 de Abril con Rosario Central por 1 a 1. “La División Judicial de la Unidad Regional Uno está tramitando de oficio los hechos de violencia vividos en la cancha” indicó el juez Falkenberg.
El último sábado se registraron hechos de suma violencia al cabo del encuentro que disputaron los equipos en su compromiso por la 16a. fecha de la Primera B Nacional. Las imágenes, que fueron registradas por las cámaras de televisión, dan cuenta de una escaramuza que involucró a policías, hinchas y jugadores, cuyas responsabilidades deberán ser evaluadas.
Al tanto de ello se puso la fiscal Nº 1, Liliana Lauxmann, que “tomó intervención de acuerdo al turno y se encontraba preparando el requerimiento para solicitar medidas”, amplió el juez.
La gravedad del hecho hizo que rápidamente tomaran conocimiento en la Jefatura de Policía, que esta semana “pidió copia del sumario prevencional para realizar los sumarios administrativos correspondientes”.
Por otra parte, el juez aseguró que no sólo son policías los involucrados, sino que “está previsto citar a los jugadores de fútbol” que habrían tomado cartas en el asunto. En tal sentido, resumió que se investiga tanto “la agresión de los policías para con el hincha, como la presunta arenga de jugadores que fomentaron la violencia” y reaccionaron con golpes e improperios.
Cinco puntos
En cuanto a la nota presentada por Zalazar plantea en cinco puntos que van desde la sanción penal para jugadores y policías cuyo accionar resulte delictivo, hasta la clausura e inhabilitación del estadio 15 de Abril.
Para fundar sus presunciones toma como fuente las imágenes televisivas y fotográficas, así como el relato de periodistas que estuvieron dentro de la cancha el sábado a la noche.
En primer término pide sanciones “a los gestores, incitadores y motivadores de la violencia”, entre ellos jugadores del Club Unión, bajo la normativa del “régimen penal y contravencional para la prevención y represión de la violencia en espectáculos deportivos” Ley Nº 24.192.
Zalazar apunta a los deportistas como los “únicos incitadores de la violencia” y cuestionó que sólo “reciban una sanción de parte del Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino”.
A propósito de ello ofreció que se agregue al expediente judicial “el informe del árbitro Diego Ceballos, que contó sobre las inconductas de los jugadores del Club Unión, Pablo Pérez y Rodrigo Mannara”.
El tercero en quedar involucrado sería Nicolás Correa ya que “el informe policial refleja claramente el grado de exaltación del jugador”, dice Zalazar.
El último sábado se registraron hechos de suma violencia al cabo del encuentro que disputaron los equipos en su compromiso por la 16a. fecha de la Primera B Nacional. Las imágenes, que fueron registradas por las cámaras de televisión, dan cuenta de una escaramuza que involucró a policías, hinchas y jugadores, cuyas responsabilidades deberán ser evaluadas.
Al tanto de ello se puso la fiscal Nº 1, Liliana Lauxmann, que “tomó intervención de acuerdo al turno y se encontraba preparando el requerimiento para solicitar medidas”, amplió el juez.
La gravedad del hecho hizo que rápidamente tomaran conocimiento en la Jefatura de Policía, que esta semana “pidió copia del sumario prevencional para realizar los sumarios administrativos correspondientes”.
Por otra parte, el juez aseguró que no sólo son policías los involucrados, sino que “está previsto citar a los jugadores de fútbol” que habrían tomado cartas en el asunto. En tal sentido, resumió que se investiga tanto “la agresión de los policías para con el hincha, como la presunta arenga de jugadores que fomentaron la violencia” y reaccionaron con golpes e improperios.
Cinco puntos
En cuanto a la nota presentada por Zalazar plantea en cinco puntos que van desde la sanción penal para jugadores y policías cuyo accionar resulte delictivo, hasta la clausura e inhabilitación del estadio 15 de Abril.
Para fundar sus presunciones toma como fuente las imágenes televisivas y fotográficas, así como el relato de periodistas que estuvieron dentro de la cancha el sábado a la noche.
En primer término pide sanciones “a los gestores, incitadores y motivadores de la violencia”, entre ellos jugadores del Club Unión, bajo la normativa del “régimen penal y contravencional para la prevención y represión de la violencia en espectáculos deportivos” Ley Nº 24.192.
Zalazar apunta a los deportistas como los “únicos incitadores de la violencia” y cuestionó que sólo “reciban una sanción de parte del Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino”.
A propósito de ello ofreció que se agregue al expediente judicial “el informe del árbitro Diego Ceballos, que contó sobre las inconductas de los jugadores del Club Unión, Pablo Pérez y Rodrigo Mannara”.
El tercero en quedar involucrado sería Nicolás Correa ya que “el informe policial refleja claramente el grado de exaltación del jugador”, dice Zalazar.
La ley es para ser respetada por todos, aún para los jugadores que se creen que dentro del campo de juego son omnipotentes y pueden sin problema alguno violar las leyes, lo acontecido no se soluciona con una simple fecha de suspensión, esta vez hay una denuncia penal...Miguel...
No hay comentarios:
Publicar un comentario